Selección poética de la obra de Bergamín, autor que defendió siempre un modo maravillado de lectura; enamorado de nuestros clásicos, difunde ese amor entre los lectores. De este modo (...) fundamenta de modo sólido su propia escritura, enlazando con la brillante tradición literaria española. Parte de una búsqueda metafísica que intenta encontrar lo esencial más allá de las apariencias, que tan superficialmente enredan al hombre del siglo XX.Es importante su labor fundamental de constructor de la idea del 27 sobre la crítica posterior.Los temas de su poesía y de su obra en general son el sueño, la muerte, la propia muerte, el silencio, el tiempo, la angustia, la infancia, la religión, Dios, el Diablo, el amor, la poesía, el fantasma y el esqueleto; entre otros.
José Bergamín (Madrid, 1895-San Sebastián, 1983). Poeta, dramaturgo y prosista de la Generación del 27, es una de las personalidades más sugestivas de lo que ha dado en llamarse la Edad de Plata de la literatura española. Bergamín aporta a la cultura de nuestra lengua su polifacética y multiforme actividad creadora, caso único, quizá, en nuestra literatura, con una vasta creación literaria. Además, hay que añadir la fundación y dirección de revistas, como Cruz y Raya y España Peregrina y su labor al frente de la editorial Séneca. Su obra se enriqueció durante los largos años de exilio; período durante el que escribió diversas obras de teatro y, así mismo, destacó como articulista en periódicos y revistas como Taller, Hoy, El Hijo Pródigo, España Peregrina de México y, sobre todo, El Nacional de Caracas. En 1958, se le permitió regresar a España, aunque, cinco años después, fue de nuevo expulsado, volviendo definitivamente a Madrid en 1970. Aquí escribió y publicó la mayor parte de su obra poética y continuó con sus artículos periodísticos en Sábado Gráfico, sobre todo. Murió en San Sebastián, en 1983, cansado de ser español.