AJAHN SUMANO BHIKKHU
Este libro contiene toda la información que necesaria para que tu mente se mantenga alerta, sea ágil y poderosa y, sobre todo, esté en guardia contra las presiones mentales y psicológicas que desvían tu atención. Las ideas que se proponen en estas páginas son simples y prácticas pero requieren voluntad. Como todo lo que vale la pena, un esfuerzo sincero y determinado será el motor que activará los abundantes beneficios que se obtienen al poseer una mente iluminada.
Personas de todas las edades y estilos de vida pueden beneficiarse de las técnicas para mantener la atención y estar alerta, desde oficinistas e informáticos, hasta profesores y estudiantes, pasando por vendedores, taxistas o amas de casa. Tanto si estás en una reunión de trabajo, en clase, preparando la cena o participando en una clase de yoga, el fundamento es el mismo, la mente cambia, pero su naturaleza permanece inalterable.
La mente iluminada es capaz de tomar decisiones más adecuadas y, como sabemos por propia experiencia, nuestras decisiones tienen un gran impacto en nuestras vidas, pues determinan lo que hacemos, donde trabajamos y con quien compartimos nuestra vida.
Este libro es la perfecta introducción a la meditación budista cuyos beneficios nos acompañarán a lo largo de nuestro camino.
Ajahn Sumano Bhikkhu nació en Chicago. Aprendió las verdades esenciales sobre nuestra mente directamente de los grandes maestros de meditación del siglo XX.
Antes de ordenarse monje hace 25 años, Ajahn Sumano Bhikkhu había vivido la vida habitual de un americano en la universidad, el ejército y el sector público. Fue hombre de negocios, investigador en la Universidad de Stanford y trotamundos. A los 29 años abandonó las actividades de la vida convencional y, en la Universidad de Stanford, se dedicó al estudio de la filosofía, la psicología, la religión comparada y la lingüística con la intención de desentrañar el misterio de la naturaleza humana y la existencia, sin hallar una respuesta que le pareciera satisfactoria.
Durante un viaje de año y medio por el mundo tuvo su primer contacto con Oriente y el Budismo. Tras conocer al famoso maestro de meditación de la tradición errante tailandesa, Phra Ajahn Chah Supatto, se convirtió a su vez en monje errante y viajó a Tailandia. Sumano lleva 15 años viviendo en un santuario cueva en la provincia de Nakhon Ratchasima.