SNICKET, LEMONY / HELQUIST, BRETT
Los libros de culto en los que se basa la nueva gran serie de Netflix. Querido lector, Siento decirte que el libro que tienes en las manos es extremadamente desagradable: cuenta la triste historia de tres niños con muy mala suerte. Los hermanos Baudelaire llevan una vida repleta de desgracias e infortunios. Vaya, que son un imán para las catástrofes. Sólo en este librito, se enfrentan a un malvado codicioso y repulsivo, sobreviven a un incendio terrible, a un complot para despojarlos de su fortuna y se ven obligados a llevar ropa que pica. Yo tengo la triste obligación de escribir estos desagradables acontecimientos, pero a ti nada te impide cerrar inmediatamente este libro y leer algo más alegre, si eso es lo que prefieres. Con todo mi respeto, Lemony Snicket
Lemony
Snicket, autor y narrador
de la serie, es un misterioso y elusivo escritor de quien Daniel
Handler es, según propia confesión, el «representante». De Lemony
Snicket se sabe a ciencia cierta que «nació antes que ustedes y es probable que
también se muera antes». De Handler, en cambio, se tienen algunos datos más.
Nacido en San Francisco en 1970, es un lector compulsivo y un consumado
acordeonista que, además, ha escrito tres novelas adultas: The Basic Eight, Watch Your
Mouth y Adverbs, esta última de próxima
publicación en Tusquets Editores. Autor de culto, que emplea la ironía e
innovadores formatos literarios para abordar los temas de siempre -la infancia,
el amor, las dificultades de la adolescencia- desde una perspectiva muy
personal, se consagró con el rotundo éxito mundial de la «Serie de
catastróficas desdichas», de cuyos tres primeros libros se hizo una adaptación
cinematográfica, con Jude Law y Jim Carrey en los papeles estelares.
Brett Helquist, nacido en
Arizona y con estudios de Bellas Artes en la Brigham Young University, es quien
ilustra esta serie. La deprimente tarea de ilustrar las tristes vidas de los
huérfanos Baudelaire le ha llevado a adquirir la costumbre de mandarse flores a
sí mismo, pero no parece servirle de mucho. Mientras tanto, sigue trabajando.