CAMPO VIDAL, MANUEL
Este libro no solo contesta a la pregunta de por qué los españoles comunicamos tan mal, sino también a otras como: ¿Quiénes han sido los mejores comunicadores de los últimos años en España? ¿Y los peores? ¿Cuáles han sido las meteduras de pata más sonadas? ¿Y los aciertos más destacables? Y, por último: ¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra comunicación? Para resolver estos interrogantes, el reconocido periodista Manuel Campo Vidal pasa revista a los defectos y virtudes de la comunicación pública en nuestro país. La obra analiza los errores habituales que cometemos en España, los ejemplifica con nombres de personajes públicos muy conocidos y propone, finalmente, una serie de valiosos consejos para mejorar la comunicación. Un libro necesario y clarificador, repleto de sabrosas anécdotas.
MANUEL CAMPO VIDAL Manuel Campo Vidal es periodista, Doctor en Sociología e ingeniero técnico. En su extensa carrera profesional, presentó los informativos diarios en TVE 1 entre 1983 y 1986, y más tarde, el programa «Punto y Aparte». En radio, dirigió durante cuatro años el programa informativo «Hora 25» (Cadena Ser). Fue director de Antena 3 TV y en 1995 fue nombrado Vicepresidente de esta cadena hasta 1997. Creó y dirigió los programas «Generación XXI» y «Soñadores», dedicados a promover el emprendimiento y que se han emitido en diferentes televisiones de todo el país. Negoció y moderó en 1993 el primer debate electoral televisado en España entre José María Aznar y Felipe González. Quince años después negoció los dos debates electorales entre José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, y moderó el primero de ellos como Presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias de la Televisión.
Es Director del Instituto de Comunicación Empresarial, donde imparte cursos a directivos y portavoces, y dirige la Cátedra «Comunicación Profesional y Empresarial» de la Universidad Europea de Madrid. Participa con la sección «Comunica que algo queda» en el programa de Radio Nacional «No es
un día cualquiera», dirigido por Pepa Fernández.