ARIEL CARPENA, FERNANDO
¡Pero qué alegría verte por aquí!Parece que te van las emociones fuertes, con mansiones encantadas,médiums despistadas, espectros indecisos y, más siniestro aún, adultos cabezotas.Admiro tu valor, y por eso te doy la bienvenida. Espero que tuestancia entre estas páginas sea tan espeluznante como deseas, que sus palabras te asalten en mitad de la noche y que oleadas inexplicablesde letras te susurren todo lo que nadie se atrevió a contar.Como podrás comprobar, este Hotel ocupado está casi completo; perosolo casi? Aún nos queda un hueco. El tuyo.Tu anfitrión