GARCÍA NIETO, NARCISO
Amigo tutor: Tienes delante el grupo de alumnos que se te ha confiado. No mires las razones que, seguramente, no van a ser motivación suficiente frente a la responsabilidad que adquieres. Míralo desde el aspecto de la oportunidad que esta encomienda te brinda. Para empezar, es para ti un reto, por muchos años que hayas desempeñado esa tarea en tu vida profesional como educador. Siempre se puede aprender, si tienes la actitud de un verdadero buscador: estos materiales que ahora te brindamos no pretenden otra cosa. Dos actitudes o sentimientos deben acompañarte: En primer lugar, no les tengas miedo: no son tan malos, ni pretenden aguar la vida de nadie. Tal vez sean un poco descarados, imprudentes... y, hasta donde llegue su malicia, la vas a saber disculpar. Pero, acércate a ellos con respeto. personaliza tu tarea porque cada uno de tus alumnos es único, y te va a permitir colaborar en sus proyectos personales y grupales y, sobre todo, en el más importante: entrar, con su permiso, en sus vida bulliciosas, infantil aún y desdibujada. Ahí se aplica tu trascendental tarea, hecha de respeto y firmeza también con firmeza. este ejercicio diario te va a hacer merecer un rincón definitivo en su vida. No lo dudes nunca: por esta responsabilidad de TUTOR, tú eres pieza clave en tu Centro.