MARTOS, ANA
En lo m s profundo de nuestra mente civilizada, dormita una bestia salvaje. Es violenta, cruel, irracional; es ego¡sta, busca su satisfacci¢n sin preocuparse del da¤o que pueda causar a otros, porque los otros no cuentan. Se alimenta de rencores, se viste de recuerdos, se fortalece con el xito, se ejercita con la pr ctica. No podemos librarnos de ella. No podemos dominarla. Pero podemos conocerla y podemos educarla. Todos los avances cient¡ficos y tecnol¢gicos de nuestro siglo no han sido capaces de ense¤arnos a conocer y controlar la enorme carga de irracionalidad que dormita en nuestro cerebro y eso nos hace v¡ctimas de la bestia de otros o de nuestra propia bestia