MORA, MANUEL R.
Dos suicidios, el de una joven de 17 años y el de su padre, ocurrido unos meses después, en la madrugada del 9 de enero de 796o, van a convertirse en la llave que abre un reguero de historias cruzadas que la memoria colectiva de un pueblo tenía enterradas y que al cabo de los años acaban por desvelar su sorprendente y asombrosa realidad, porque casi nada fue como pareció que había sido. El miedo a recordar se revela como el guardián más eficaz del silencio de un pueblo. Después de una guerra fratricida, cada memoria se convierte en una cárcel blindada, y el olvido se extiende como una consecuencia natural de la tragedia. Hasta que un dia un vendaval de preguntas y respuestas quiebra las rejas, descoyunta la prisión, y la verdad fluye, incontenible. Manuel R. Mora no escribe sobre una guerra, sino sobre lo que ocurre después de ella. No busca el fragor de la batalla ni la clave de su sinrazón. Se queda con el pueblo malherido que sobrevive a pesar y por encima de los recuerdos, sin esperar ninguna redención. Los personajes tienen una enorme fuerza proteica, que el autor ha sabido recrear y transmitir literariamente, sin desdeñar ni un ápice de sus recónditas memorias. Todo un pueblo se mueve y palpita en esta obra gigante. Grandes maestros de la narrativa actual tienen aquí un émulo fiel, de una altura creativa que conmueve y entusiasma. Mora resuelve, con gran precisión narrativa y dominio de la intriga, el múltiple enigma de todo un pueblo.