GRACQ, JULIEN
«Cuando rememoro la época en que se acababa mi juventud, nada me parece más opresivo, más perturbador, que el recuerdo de los meses en que maduraba, sin comprenderlo aún, la resolución de la guerra de 1914...»
El protagonista de El rey Cophetua, un soldado sin nombre que resultó herido en la Batalla de Flandes, inicia El rey Cophetua al rememorar el otoño de 1917 en Francia, justo antes de que la guerra llegase a su final. Es el día de Todos los Santos. Mientras el personaje viaja desde París a Braye-la-Foret para visitar a un viejo amigo, Nueil, evoca todos sus recuerdos de la guerra, los bombardeos y el dolor. Entretanto, piensa en su amigo: se pregunta por qué lo habrá llamado y, al mismo tiempo, desea verlo. Pero cuando finalmente llega a la villa de Nueil, este no está. En su lugar lo recibe una doncella, también sin nombre.
Entre esos dos desconocidos prácticamente anónimos tiene lugar un encuentro (retratado por André Delvaux en su película Rendez-vous à Bray) que, más que por el presente y el futuro, se preocupa por el pasado, por revivir, mediante un plano intemporal donde sólo quedan sombras, el momento que «marcó el fin de su juventud».
Julien Gracq (Saint Florent-le-Vieil, 1910) és un dels màxims exponents de la literatura contemporània. Va ser catedràtic de Geografia i Història, pero sempre s'ha estimat més l'ensenyament de secundària que l'universitari. Viu al seu poble natal, lluny dels cercles literaris i de les desfilades mundanes, fet que no li ha impedit de convertir-se en un dels autors més admirats i llegits. A banda de Les aigües estretes (Quaderns Crema, 2007), entre les seves obres destaquen Au château d'Argol (1938), Un beau ténébreux (1945), Le Rivage des Syrtes (1951) i Carnets du grand chemin (1992).