Una estudiosa de Rembrandt recibe unos manuscritos que resultan ser el diario de Samuel Bol, quien fue el discípulo de Rembrandt en sus dos últimos años de vida. Samuel entra en la vida del maestro cuando éste, ya anciano, vive acuciado por la enfermedad y las deudas. Hasta que un día reciben un encargo inesperado: el retrato de un ilustre catedrático de Anatomía mientras realiza en público la disección de un cadáver, una práctica que la Iglesia sólo autoriza en cuerpos de ajusticiados. Pero en Ámsterdam hace meses que ningún reo es condenado a la horca El discípulo de Rembrandt es una novela que refleja con claridad la vida cotidiana del Ámsterdam del siglo XVII y los últimos años de uno de los grandes genios de la pintura.