WELSH, IRVINE
El sargento Bruce Robertson no es un policía modélico, sino corrupto, misántropo, violento, machista, homófobo y racista. Consume compulsivamente pornografía, servicios de prostitutas, fast food, alcohol y cocaína. Debido a sus excesos, le ha aparecido un sarpullido que invade sus genitales y un incordiante parásito en el intestino que acaba convirtiéndose en la voz de su conciencia. Y mientras su vida se desmorona, el sargento tiene que investigar el asesinato del hijo de un diplomático africano... Fiel a su habitual contundencia, Welsh nos presenta un viaje a lo más abyecto, en el que se mezclan la visceralidad, la violencia y el humor negro.
Irvine Welsh nació en 1958 en Escocia. Creció en el corazón del barrio obrero de Muirhouse, dejó la escuela a los dieciséis años, cambiando multitud de veces de trabajo hasta que emigró a Londres con el movimiento punk. A finales de los ochenta volvió a Escocia, donde trabajó para el Edinburgh District Council a la par que se graduaba en la universidad y se dedicaba a la escritura. Su primera novela, Trainspotting, tuvo un éxito extraordinario, así como su adaptación cinematográfica.