BAUMAN, ZYGMUNT
La producción de «residuos humanos» o, para ser más precisos, las poblaciones «superfluas» de emigrantes, refugiados y demás parias es una consecuencia inevitable de la modernización. También se trata de un ineludible efecto secundario del progreso económico y la búsqueda de orden, característicos de la modernidad. Mientras vastas regiones del mundo permanecieron total o parcialmente al margen de la modernización, las demás sociedades las veían como zonas capaces de absorber el excedente de población de los «países desarrollados». Se buscaban --y se hallaban de forma temporal-- soluciones globales a los problemas de superpoblación producidos localmente. Pero, a medida que la modernización ha ido alcanzando las áreas más remotas del planeta, se ha generado una gran cantidad de «población superflua», y ahora son todas las regiones las que han de cargar con las consecuencias. Por lo tanto, nos enfrentamos a la necesidad de buscar soluciones locales a problemas producidos globalmente.
La propagación global de la modernidad ha dado lugar a un número cada vez más elevado de seres humanos que se encuentran privados de medios adecuados de subsistencia, y a la vez el planeta se está quedando sin lugares donde ubicarlos. De ahí las nuevas inquietudes acerca de los «inmigrantes» y los que piden «asilo», así como la importancia creciente del papel que desempeñan los difusos «temores relativos a la seguridad» en la agenda política contemporánea.
Zygmunt Bauman desentraña el impacto de esta transformación sobre la cultura y la política contemporáneas, y muestra que el problema de hacer frente a los «residuos humanos» brinda una clave para comprender algunas peculiaridades, por lo demás desconcertantes, de nuestra vida en común, desde las estrategias de dominación global hasta los aspectos más íntimos de las relaciones humanas.
Zygmunt Bauman nació en Poznan, Polonia, en 1925. Tras la invasión
nazi, su familia se refugió en la zona soviética y Bauman se alistó en el
ejército polaco, que liberaría su país junto a las tropas soviéticas. Fue
miembro del Partido Comunista hasta la represión antisemita de 1968; la
consiguiente purga le obligó a abandonar su puesto como profesor de filosofía y
sociología en la Universidad de Varsovia. Desde entonces ha enseñado sociología
en Israel, Estados Unidos y Canadá, y es profesor emérito en la Universidad de
Leeds. Autor de una obra abundante, en la que destacan libros fundamentales de
la sociología contemporánea como Modernidad
y holocausto o Modernidad líquida,
Bauman ha alcanzado en estos últimos años el reconocimiento que merece un
intelectual de su talla y trayectoria. Ha sido galardonado con el Premio Amalfi
de Sociología y Ciencias Sociales (1992) y el Theodor W. Adorno (1998).