PEREZ MERLO,SANTIAGO
(AUTO)MANDAMIENTOS
No contaminar
paraísos ni universos.
No estropear
la belleza del silencio con palabras absurdas.
No manchar
la pureza del blanco con mi letra pueril.
No ocupar
los lugares que no me pertenecen.
No tratar de volar
cuando sé que mis zapatos son de plomo.
No tratar de pisar la Madre Tierra,
mientras pueda mirar desde lo alto.
No importunar al prójimo
cuando está demostrado
que no me queda nada que añadir.
Por supuesto, no hacer daño.
Por supuesto, tratar de ser feliz...
aunque sea lejos de las palabras
incluso de la palabra felicidad.
No aspirar nunca más
a ser lo que no soy.