DÍAZ FERNÁNDEZ, ANTONIO M. / DIAZ FERNÁNDEZ, ANTONIO M
CAPÍTULO 1. INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO 2. TEMAS SENSIBLES
CAPÍTULO 3. ASPECTOS ÉTICOS Y LEGALES
CAPÍTULO 4. FASES DEL TRABAJO DE CAMPO
CAPÍTULO 5. EL TRABAJO DE CAMPO: TÉCNICAS DE RECOPILACIÓN DE INFORMACIÓN
CAPÍTULO 6. RIESGOS Y MEDIDAS DE PROTECCIÓN
CAPÍTULO 7. CONCLUSIONES
ANEXOS
BIBLIOGRAFÍA
Investigar a víctimas de delitos, desviados de la norma social, delincuentes, organismos de seguridad o bandas criminales, alberga una sensibilidad que abarca a todo el proceso de la investigación. El profesional que quiera abordar estos temas deberá hacer frente a una serie de retos metodológicos, logísticos y éticos derivados de la dificultad para acceder a estas poblaciones, estimar la muestra, grabar testimonios o garantizar el anonimato a personas que desarrollan actividades ilícitas, desviadas u ocultas. Esta obra aborda todos estos desafíos: desde la elaboración de un protocolo y un consentimiento informado, hasta la elección de un rol operativo, pasando por la elección de la mejor técnica de obtención de información y el desarrollo de medidas de protección para los participantes y los investigadores. Junto a la reflexión teórica sobre los temas más habituales dentro del campo de la Criminología y la Seguridad, se analizarán las soluciones que pusieron en práctica otros investigadores.
Antonio M. Díaz Fernández, doctor en Ciencia Política y licenciado en Derecho, es investigador del Instituto Universitario General Gutiérrez Mellado y profesor de Ciencia Política y de la Administración en la Universidad de Burgos. Es miembro del Security and Intelligence Study Group del Reino Unido y ha sido investigador visitante en el International Center for Security Analysis del King´s College de Londres. Ha dado clases en la Universitat de Barcelona y en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), de San Salvador. Ha participado en diferentes proyectos de investigación sobre inteligencia y seguridad, y ha impartido conferencias en diferentes centros civiles y militares como la Escuela de Guerra del Ejército de Tierra. En 1997 ganó el Premio Ejército de enseñanza universitaria y en 2003 el Premio Defensa de investigación científica.