EDITH WHARTON
Los cuentos inquietantes aquí reunidos, buena parte de los cuales han permanecido inéditos en castellano hasta hoy, lo son cada uno a su manera. Algunos se escoran levemente hacia lo sobrenatural, en la línea de los geniales relatos de fantasmas de Henry James, historias en las que el elemento ultraterreno sobrevuela la cotidianidad de modo casi imperceptible: sutilmente invasivo, tan evanescente en ocasiones que la duda atenaza al lector hasta el final provocándole una deliciosa inquietud. Y en otros (más desasosegantes si cabe, por cuanto prescinden de lo asombroso) el misterio se oculta en la propia mente, en las ambiguas actitudes de personajes que se nos antojan perturbadores gracias a la pericia de la autora para manejarse en los meandros de su psicología. Una auténtica obra maestra de lo oscuro que se esconde tras lo cotidiano.
Leyendo estos relatos, los amantes del escalofrío exquisito se adentrarán en atmósferas subrepticiamente inquietantes que inciden en la falacia de la apariencia haciendo realidad la premonición de Borges: «Cualquier instante puede ser el cráter del infierno».
Nació en Nueva York en 1862, en el seno de una familia acomodada. Educada con institutrices, abundantes lecturas y viajes al extranjero, se casó en 1885 y, en 1902, publicó su primera novela, The valley of decision, tras la que no dejaría de escribir hasta su muerte en 1937. Vivió en París a partir de 1907, donde acabaría estableciéndose. Durante la primera guerra mundial asumió arriesgadas tareas de ayuda a los aliados, por las que recibió, en 1915, la Legión de Honor. Reconocida en vida como la heredera de Henry James, Edith Wharton es hoy considerada como una de las grandes novelistas de la literatura norteamericana, autora de grandes títulos, entre sus cuarenta y seis libros de ensayo y ficción, como The House of Mirth (1905), Un hijo en el frente (1919), La edad de la inocencia (1920), y The Children (1928), títulos en los que destaca su maestría y su fina, pero no menos demoledora, sátira de los valores sociales establecidos.