SÉNECA
Nacido en Córdoba, en el seno de una familia acomodada y culta, Lucio Anneo Séneca (ca. 1 a.C.-65 d.C.) participó en la agitada vida política romana durante los azarosos reinados de Calígula, Claudio y Nerón, quien acabó forzándole al suicidio. Partidario de la filosofía estoica, basada en la autarquía de la virtud (único bien verdadero, accesible a todos en cualquier parte), legó una copiosa obra, dentro de la cual destacan sus escritos consolatorios, pertenecientes a un género orientado a procurar la superación de un trance amargo, mitigando o suprimiendo la pena o la tristeza que comporta. Integran este volumen las consolaciones a Marcia, a su madre Helvia y a Polibio, así como una selección de las célebres cartas a Lucilio.
Introducción y traducción de Perfecto Cid Luna
Filósofo y escritor, Lucio Anneo Séneca fue una figura tan representativa de su época como Cicerón de la suya. Nacido en Córdoba, hacia los inicios de la era cristiana, fue preceptor del futuro emperador Nerón y uno de los personajes más influyentes y poderosos de Roma cuando éste llegó al poder. Cortesano y político, amasó una gran fortuna mientras cultivaba la poesía y la filosofía. Se retiró de la corte (62 d.C.) para llevar una vida ascética pero, sospechoso de conjura, recibió orden de morir y se abrió las venas en el 65 d.C. Cultivó géneros muy diversos, pero sólo se han conservado íntegras sus tragedias, la sátira contra el emperador Claudio y obras filosóficas, entre las que destacan los diálogos (Sobre la brevedad de la vida, Sobre la tranquilidad del alma; etc.) y las Cartas morales a Lucilio.